Era práctica habitual en los equipos de fútbol que, hasta principios de los años 1910, la plantilla fuese confeccionada por el presidente y la junta directiva, que decidían los fichajes, los traspasos y, en la mayoría de los casos, camisetas del barça las alineaciones de los partidos. Los entrenamientos, que en aquella época eran pocos pues el fútbol no era profesional, camiseta barça solían autogestionarlos los propios jugadores.